Vamos a ello. Primero, dibuja dos óvalos: uno para la cabeza y otro debajo para la mandíbula. Luego, dibuja algunos trazos para delinear la cara y los ojos (más tarde los perfeccionarás) y haz lo mismo con otros elementos de la cara, como la nariz, los labios, los ojos o el cuello. Intenta dibujar cada elemento por separado para luego implementarlos correctamente en la cara. Los trazos que hagas te ayudarán a establecer las proporciones básicas de cada rasgo facial que dibujes. Ahora, perfecciona cada elementos de acuerdo con las proporciones que has establecido. Si tu cartoon va a tener un tono cómico o satírico, tendrás que exagerar algunos rasgos físicos del personaje, pero debes mantener siempre un equilibrio entre, por ejemplo, la altura y el tamaño de los ojos o la forma de los labios. Además, en Freepik podrás encontrar miles de plantillas que pueden servirte como punto de partida a la hora de crear tu propio diseño.